Los futbolistas sientieron el aliento de su afición desde que encararon la Avenida Suecia para llegar a Mestalla
Miles de personas se agolparon en los aledaños de Mestalla para recibir a su equipo dos horas antes de que el partido empezara. Es habitual que esto suceda cuando el Valencia tiene un compromiso importante y el de ayer lo era. El equipo de Nuno se enfrentó al Mónaco en la ida de la previa de la Champions League y el partido acabó 3-1 a favor de los locales. El gol de Feghouli en el minuto 85 desató la locura en Mestalla.
Pero bastante antes la Avenida Suecia era un hervidero. La policía marcaba la distancia con los caballos y hubo alguna protesta por parte de los aficionados. Fue el único abucheo de la tarde. El resto fue una fiesta con todo el repertorio de canciones para animar al equipo entonadas por miles de personas. Valencianismo en estado puro. El momento álgido, lógicamente, se produjo con la llegada del autobús del equipo.
Durante el partido la afición estuvo apoyando a sus jugadores pero surgieron dudas a raíz del gol del Mónaco. El entusiasmo del recibimiento quedaba muy lejos. Afortunadamente, el Valencia consiguió ganar el partido y viajará al Principado de Mónaco con cierta ventaja. Así, la fiesta en Mestalla fue completa