El ex presidente del Valencia CF es detenido y puesto en libertad con cargos por, supuestamente, intentar raptar a otro ex presidente del Valencia, Vicente Soriano, con el fin de cobrar la deuda que el segundo mantiene con el primero.
La crónica de sucesos se apodera de la actualidad del Valencia CF. Juan Bautista Soler fue detenido anoche tras descubrirse una trama por la cual, supuestamente, quería secuestrar a Vicente Soriano. La disputa legal entre ambos ex máximos dirigentes de la entidad por la fallida compra de acciones en 2009 ha derivado en un ajuste de cuentas propio de la 'cosa nostra'. Por aquel entonces Soriano se comprometió a pagar a Juan Soler 85 millones de euros por un total de 70.899 acciones que, a su vez, Soriano iba a revender a Dalport para que esta empresa se hiciera dueña del Valencia. Así sucedió salvo un pequeño detalle: el dinero no apareció. Luego vino la ampliación de capital financiada por Bankia y avalada por la Generalitat y la vuelta de Manuel Llorente al club. A partir de ese momento Soler y Soriano entraron en una batalla legal de la que salió vencedor el primero. En junio de 2011 la Audiencia Provincial del Valencia dictaminó que Soriano debía pagarle 38 millones a Juan Soler por incumplimiento de contrato. Los posteriores recursos interpuestos por Soriano fueron desestimados. Parece ser que la insolvencia declarada de Soriano impidieron el pago de esa cifra y Juan Soler decidió presionar, supuestamente, por otras vías alejadas de la legalidad.
El Juzgado número 12 de Valencia ha puesto en libertad con cargos a Juan Soler con la condición de que acuda al juzgado cada 15 días, no salga de España y se mantenga alejado de Soriano a más de 15 metros. Esta curiosa orden de alejamiento viene propiciada porque la residencia de Juan Soler y el despacho de Soriano se encuentran muy próximos.