El Valencia se presenta en Sevilla tras nueve años sin ganar en el Pizjuán y un último precedente muy doloroso. El equipo de Pizzi pone a prueba la certeza de su reconversión en un escenario más que exigente.
El Valencia y el Sevilla se enfrentan en un partido de alta tensión. La última vez que ganó el Valencia en el Sánchez Pizjuán marcaron Vicente y Baraja para certificar el título de Liga. Luego el equipo hispalense vivió años de vino y rosas y, ahora, unos y otros pelean por la séptima plaza. La situación social del Valencia es de sobra conocida y al ex presidente del Sevilla le han concedido una prórroga de una semana antes de entrar en prisión a la espera de un indulto. Y aún así, a las 21.00 de la noche se espera un partidazo en Sevilla. Uno de los mejores que puede ofrecer la Liga Española, que hasta hace poco era la mejor del mundo.
Eso sí, el Valencia, al menos en lo deportivo, viene desde abajo y con hambre. El Sevilla que también empezó mal la Liga parece que estaba en esas hasta hace unas jornadas. Últimamente el equipo de Emery ha encadenado una serie de malos resultados. Las últimas informaciones apuntan a que al entrenador vasco le buscan sustituto para cuando acabe la presente temporada. Será un duelo de viejos conocidos y de casi viejos conocidos: Gameiro, Nico Pareja e Iborra fueron pretendidos en algún momento por el Valencia. El Sevilla es un rival mal encarado y más en su campo. Nueve años sin ganar en el Pizjuán es por algo. La historia más reciente nos retrotraen escenas antideportivas de los futbolistas sevillistas que contaron con el beneplácito de los colegiados. Pero el Sevilla, además, siempre tiene buenos jugadores de fútbol. Pizzi destacó al delantero Bacca en rueda de prensa además de a los consabidos Reyes o Rakitic. El futbolista croata está ofreciendo su mejor rendimiento desde que llegó a Sevilla. La propuesta futbolística de Emery sumado al ADN competitivo del Sevilla hacen que el equipo del barrio de Nervión pueda ser temible. La irregularidad y la debacle contra el Racing en Copa del Rey les está privando de hacer una buena temporada.
Por su parte, para el Valencia, ahora mismo, todo son reválidas. Los buenos resultados han despejado muchas dudas pero todavía es pronto para saber si la reconversión del equipo tiene continuidad en el tiempo. Viendo como preparan el partido y escuchando el discurso de Pizzi parece difícil que los futbolistas puedan perder la intensidad en el terreno de juego. La baja de Piatti lesionado en el último entrenamiento trastoca seriamente los planes de Pizzi. El delantero valencianista se había convertido en un hombre fundamental y el único futbolista con un perfil similar de desborde por la banda es Bernat que, obligatoriamente, ha de ocupar el lateral. El técnico argentino estuvo probando con Fede en la última sesión preparatoria. La otra novedad en el once, según los entrenamientos, es la inclusión de Ricardo Costa en vez de Senderos. El resto del equipo será el mismo que jugó contra el Betis. Aunque hay señales en esa dirección, el Valencia todavía no ha entrado en el círculo virtuoso. Al fin y al cabo, sólo han conseguido dos victorias aunque una fuera en el Campo Nou. El partido contra Sevilla será una prueba de máxima dificultad para ver en qué punto se encuentra realmente el equipo.