El Valencia desaprovechó en Gante la posibilidad de clasificarse para los octavos de final y hoy tiene un reto mucho más complicado en San Petesburgo.
No está dando el Valencia demasiados motivos como para pensar que hoy puede resolver su clasificación para los octavos de final de la Champions League. El partido de Vigo y la naturaleza imprevisible del fútbol permiten albergar una fría esperanza. Tan fría como la climatología que vivirá el equipo de Nuno en el estadio Petrovskly. Porque la temperatura máxima prevista para el duelo entre el Valencia y el Zenit es de cero grados y no se descarta que nieve. Sin duda, un condicionante para las aspiraciones de éxito. Pero la principal amenaza a la que se enfrenta el equipo blanquinegro estará sobre el césped. El Zenit ya demostró en Mestalla su potencial con jugadores como Hulk, Witsel, Danny, Crsicito o Garay o el delantero Dzyuba que ganó todos los duelos por alto y fue un auténtico incordio para la defensa valencianista.
El desaguisado en Gante tuvo consecuencias en la imagen del Valencia pero también en la clasificación. El equipo de Nuno sigue dependiendo de sí mismo pero una derrota en San Petesburgo podría colocarle al borde del precipicio. Todo está supeditado también, a lo que hagan Lyon y Gante en el otro partido del grupo. El Zenit ya está matemáticamente clasificado con 12 puntos, el Valencia va segundo con 6, el Gante es cuarto con 4 y cierra la clasificación el Lyon con tan sólo un punto en su casillero. Quedan dos jornadas en las que puede pasar de todo.
El Valencia llega en la incertidumbre más absoluta. El último partido en Mestalla contra Las Palmas indican que la goleada en Vigo fue un espejismo, un oasis en el desierto. Pero al menos hay una referencia positiva a la que agarrarse. Eso sí, por muy buen momento que atraviese el Celta el Zenit es otra cosa. Villas Boas cuenta con todos sus efectivos para encarar el choque mientras que el Valencia llega lastrado por numerosas bajas.
La última y más importante es la de Mustafi que se produjo contra Las Palmas. El club todavía no ha comunicado el alcance de su lesión aunque se especula con que puede estar hasta dos meses de baja. Afortunadamente Nuno ha recuperado a Abdennour aunque el tunecino todavía no ha ofrecido el rendimiento que se espera de él. Otra duda sensible que tiene el técnico portugués es la de Javi Fuego que ha viajado a Rusia con molestias. Además, Nuno no puede contar con Negredo, Rodrigo Moreno, Piatti, Barragán y Alves por baja médica y con Bakkali que no está inscrito. Por eso han entrado en la convocatoria Tropi y Rafa Mir.
Villas Boas ha anunciado que el planteamiento de su equipo será el mismo que en Mestalla, es decir, estar replegados y salir a la contra. Cuando el Zenit jugó en el coliseo valencianista también habló abiertamente de cuáles eran sus intenciones. El Valencia en el partido de ida asumió la posesión y produjo bastante juego ofensivo, sobre todo, con centros desde los laterales que acabaron siendo ineficaces. Es probable que hoy Nuno busque otras alternativas para superar el entramado defensivo ruso. Parar los contragolpes y la capacidad de Hulk para determinar el resultado serán los otros retos del equipo blanquinegro.
El escepticismo de la afición es la nota dominante ante un equipo que ha dado una imagen impropia en demasiados partidos. Sólo un fría esperanza recorre la mente y los corazones de los valencianistas. A ella hay que agarrarse.