El equipo dirigido por Angulo no tuvo un partido fácil pese al abultado resultado final. Al Valencia le costó mucho entrar en el partido pero tres goles en un cuarto de hora allanaron el camino del juvenil.
La última vez que el Albacete juvenil visitó el Antonio Puchades se llevó 9 goles de vuelta. Ese precedente y el hecho de que el equipo manchego ocupara una plaza discreta en la clasificación antes de que se jugara el encuentro podía hacer pensar que el Valencia iba a tener un partido plácido. Sin embargo el Albacete ejerció de equipo local en los primeros 15 minutos. Llevó el peso del partido y generó varias oportunidades de gol incluido un balón a la madera tras saque de falta. El Valencia no era capaz de asentarse en el partido, sin embargo, un riguroso y por otra parte absurdo penalti cometido sobre Alberto Gil le dio la posibilidad al equipo blanquinegro de adelantarse en el marcador. El propio Alberto Gil transformó la pena máxima y el partido cambió de dinámica totalmente. El equipo manchego no supo encajar el golpe y, cuando se quiso dar cuenta, el Valencia ya había marcado dos goles más por medio de Toni Martínez y Llamas. Con el 3-0 a favor, el equipo de Angulo, lógicamente, se sintió más cómodo en el campo y empezó a controlar el partido.
En la reanudación el partido estuvo igualado con alternativas en ambas porterías. Aún así, la inercia del resultado favorecía el convencimiento del Valencia y la balanza estaba claramente decantada a favor del equipo blanquinegro. Hasta el punto de que la goleada pudo ser mucho mayor. Fran Navarro que entró en la segunda parte hizo el cuarto gol y tuvo dos ocasiones más para marcar. El Albacete, finalmente, encontró el gol y siguió intentándolo hasta el final.
Con estos tres puntos y el empate de Huracán Valencia el equipo de Miguel Ángel Angulo se pone líder en solitario del grupo VII de la División de Honor Juvenil.
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