La plataforma social valencianista Bar Torino convoca a los seguidores del club de Mestalla el próximo viernes por la tarde para aunar voluntades antes de que se decida la venta
El pasado jueves un grupo de valencianistas se reunió en torno al monumento de la Afición. Bajo el reclamo de reivindicar la dignidad de una institución casi centenaria que vive el momento más delicado de su historia, surgía la plataforma social valencianista Bar Torino (no confundir con la tertulia). El domingo, antes del partido del filial contra el Sant Andreu, tomaron la iniciativa empapelando el monumento dedicado a la seguidores blanquinegros con mensajes, principalmente, en contra de la venta del Valencia.
En realidad, la Plataforma no se opone frontalmente a la venta del club. Sus aspiraciones pasan porque sea la masa social quien decida si se vende o no el Valencia y, en su caso, a quién. Cabe decir que se trata de un colectivo abierto en el que cada cual puede exponer sus inquietudes. De hecho, el único denominador común que les une es el sentimiento. A esta conclusión llegaron ayer por la tarde, de nuevo, en la plaza de la Afición, base de operaciones de la Plataforma.
Los precursores del colectivo esperaban mayor asistencia pero se volvieron a congregar cerca de 50 personas. Tras empezar el debate con un tono beligerante en contra de la venta, fueron modulando el discurso conscientes de que hay parte de la afición que sí está a favor de la entrada de un nuevo propietario. La prioridad de Bar Torino, ahora mismo, es aunar voluntades entre el valencianismo. Ellos mismos valoraban la imposibilidad de parar el proceso a falta de pocos días para que se decida el comprador. El objetivo de la plataforma, en este sentido, es otro. Pretenden que el nuevo dueño sea consciente de lo que compra. Y en primera instancia, para este viernes, quieren que los patronos sean conscientes de qué es los que están vendiendo.
Uno de los pilares de la línea argumental de la Plataforma es la denuncia a la Generalitat Valenciana a la que señalan como principal culpable de la situación del club. Pero ayer por la tarde fueron más allá y realizaron autocrítica. El Valencia está como está porque la afición lo ha permitido. Partiendo de esa idea conviene, según Bar Torino, una regeneración que incluya a todos los valencianistas. La unión de todos aquellos cuyo principal interés en este proceso de venta sea el bien del Valencia CF.
Y con esa idea convocan a todos los seguidores el club del murciélago el viernes a las 19.00 horas en la plaza de la Afición: a la Agrupació de Penyes, a la Asociación del Pequeño Accionista, a Fem Valencianisme, a la Curva Nord, a VCF Sud, a la Asociación de Futbolistas del Valencia, a los empleados del club, a los abonados, a los socios, a los simpatizantes, a la gente de los barrios, a la gente de los pueblos y a todo aquel que alguna vez ha vibrado con el Valencia. A todos estos colectivos y personas quiere reunir Bar Torino. No es para menos, el futuro está en juego.