Ayer Nuno no alineó a Otamendi en el partido contra el Mestalla
Un día después de que acabara la Liga el agente de Otamendi fue claro en sus declaraciones y garantizó la salida de su representado del Valencia CF a lo largo del verano. Eugenio Silva aseguró que entre él, Mendes y Lim arreglarían el tema. El asunto, por si fuera poco, cambió la historia del club: La respuesta de Amadeo Salvo al representante del central argentino diciendo que Mendes "no es nadie en el Valencia" puede fácilmente interpretarse como la sentencia de muerte del anterior presidente ejecutivo. Después, precisamente en la rueda de prensa de despedida de Amadeo Salvo, Layhoon Chan recordó que el precio de la cláusula de rescisión de Otamendi es de 50 millones de euros.
Hay dos fórmulas para que el internacional argentino se vaya del Valencia. Que el club negocie o que el central pague el precio estipulado en su rescisión de contrato. Ayer Nuno no alineó a Otamendi en el partido que el primer equipo disputó contra el Mestalla. La lectura que se hace es que su salida es inminente. Una noticia desastrosa en caso de confirmarse a escasos días de jugar la decisiva eliminatoria contra el Mónaco. Se debería presuponer que si el argentino sale antes de la previa será porque no ha habido acuerdo entre clubes, es decir, porque se han pagado los 50 millones de euros. Si no es así, la gestión del Valencia quedará en evidencia.
Han sido dos meses para valorar la situación del argentino. Negociar su salida a cinco días de la eliminatoria de la Champions sería una auténtica torpeza por parte de la dirigencia del club. Ahora más que nunca, atendiendo a los imperativos deportivos, son 50.