Nadie quería vender el club
Un detalle curioso de la junta de accionista fue el hecho de que la mayoría de intervinientes declararon que no querían que el Valencia se vendiera. Es cierto que mostraron su apoyo a Amadeo Salvo y respaldaron la decisión de que Peter Lim sea el nuevo dueño pero todos partían de la premisa de que no les hacía ilusión que el club de Mestalla hubiera pasado por un proceso de venta.
Este hecho nos permite hacer una reflexión que no es nueva. Amadeo Salvo y Aurelio Martínez no se rebelaron en ningún momento contra la decisión del banco. Nunca sabremos qué hubiera pasado si el presidente del Valencia hubiera utilizado su poder mediático, mítines en Mestalla incluidos, para poner en tela de juicio la postura de Bankia. Se podría haber trazado una estrategia de presión, comprometiendo a la Generalitat para que la refinanciación, y no Peter Lim, fuera el caballo de batalla.
Sin embargo se asumió muy rápido el parecer de la entidad financiera y no se sabe muy por qué. O sí. De hecho, cabe incidir de nuevo en la reunión que mantuvieron Peter Lim, Salvo y Aurelio Martínez con la Generalitat y Bankia el 10 de diciembre por la mañana. Después, la afición, mayoritariamente, apostó por Mériton pero nadie quería vender el club.
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