El equipo de Nuno se estrena en el prestigioso torneo internacional Emirates Cup. En dos días juega contra dos rivales de postín: el Mónaco y el Benfica
Hablábamos antes de la Copa EuroAmericana de cómo habían cambiado las pretemporadas de los equipos de la aristocracia del fútbol español. Ahora los clubes ya no buscan el prestigio en el Teresa Herrera, el Colombino, el Carranza o el Naranja. El fútbol de verano pasa por torneos internacionales promovidos por empresas. El año pasado el Valencia disputó la Guiness Cup y este año jugará en Londres la Emirates Cup. La Emirates tiene un formato poco habitual. Se trata de una liguilla de cuatro equipos pero no juegan todos contra todos. Participan el Mónaco, el Benfica, el Arsenal y el Valencia pero ni Mónaco y Benfica jugarán entre ellos ni lo harán Valencia y Arsenal.
Hoy el equipo blanquinegro debuta contra el equipo francés. Tal vez, un espejo en el que mirarse en el sentido de que el año pasado el Mónaco fue comprado por un magnate que hizo una fuerte inversión en jugadores. Futbolistas como Falcao, James Rodríguez o Moutinho llegaron a un club recién ascendido y pelearon por la Ligue 1. El equipo del Principado presentará, pese a la baja de James, una escuadra plagada de estrellas. Veremos si el Valencia sigue el mismo camino. De momento, Nuno comentó ayer que esperan a Enzo Pérez.
El entrenador del Valencia atendió a los medios de comunicación en rueda de prensa y señaló que el equipo que se verá hoy en Londres no será el mismo que el que empiece la Liga. Y lo dijo más allá de los posibles fichajes. Jugar dos partidos en dos días (mañana a la misma hora el Valencia se enfrenta al Benfica) hace que el técnico portugués rote a sus jugadores preferidos con el fin de dotar de competitividad al Valencia en ambos compromisos.
Cabe poner en valor el hecho de que el Valencia participe en esta competición que en pocos años ha adquirido prestigio internacional. El mundo del fútbol pone su foco en Londres estos días. Y el Valencia ahora está de moda. La elección de Peter Lim como oferta ganadora provocó, el pasado 17 de mayo, que la prensa internacional, más que la nacional, se hiciera eco de la noticia. Tal vez ahora la venta condicionada por parte de la Fundación haya tenido menos repercusión pero no cabe duda de que el club del murciélago está en proceso de desplegar las alas.
Por otra parte, se debe incidir en que las consecuencias del torneo, en el plano estrictamente deportivo, son limitadas. Ni una derrota puede influir en lo que suceda en el primer partido de Liga en el Pizjuán ni una victoria será indicativa de nada. Sin ir más lejos, el año pasado el Valencia 'bailó' al Inter de Milán en la Guiness Cup y el proyecto de Djukic fue un desastre. Así pues, queda disfrutar del escenario, del rival y de saberse observado por el fútbol mundial.
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