Los jugadores aún tienen mucho margen de mejora
Hasta el aficionado más visceral sabe que se debe ser prudente a la hora de sacar conclusiones por un partido disputado. Incluso Pizzi, en un ejercicio de honradez, reconoció en la previa que en el encuentro contra el Levante las circunstancias (entrenador nuevo), más que su propia aportación técnica, garantizarían una buena actitud sobre el césped por parte de los jugadores. Aún así, conviene destacar varios aspectos positivos del derbi. El primero es la actuación de Feghouli. El argelino, después de mucho tiempo, recordó a la máquina de jugar a fútbol que se marchó a disputar la Copa de África la temporada pasada. De tener continuidad, la aportación del interior derecho a su mejor nivel puede ser el mejor fichaje imaginable para la causa. También conviene destacar el trabajo desarrollado por Parejo aunque el jugador de Coslada está manteniendo una línea bastante regular. Es importante que el mediocentro valencianista encuentre la confianza del entrenador porque llevaba acumulados más méritos que cualquier otro. Esta justa recompensa para Parejo, debe desprender también un mensaje estimulante para Banega que ya sabe que, sólo por su condición de argentino, no va a ser titular con Pizzi. Djukic hizo muchas cosas mal pero es difícil que un equipo rinda si tu idea de juego gira sobre un jugador que no es capaz de marcar la diferencia pese a ser el que más aptitudes tiene de la plantilla. En el plano colectivo, el Valencia de la segunda parte, no dio ninguna opción al Levante. Ahora bien, tras un debut contra un rival incómodo, la prueba de fuego no tardará ni tres días en llegar en forma de partido de ida contra el Atlético de Madrid. Siendo demasiado pronto para exigirle nada al nuevo entrenador, los futbolistas ya no pueden fallar.
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