El club tiene una oportunidad histórica para ser un ejemplo en la parte directiva.
El cierre de Canal 9 ha conmocionado a gran parte de la sociedad valenciana. Es, de momento, el último capítulo de una gestión que ha conducido a la Comunitat a perder entidades que parecían imperecederas, por no hablar de otras cosas. Antes fueron Bancaja y Banco de Valencia, ahora Canal 9 y se producen escalofríos cuando se ha de completar la lista con el siguiente. Los nuevos gestores del Valencia CF tienen una oportunidad histórica para cambiar la manera de hacer las cosas. Han sido puestos a dedo por la Generalitat, es cierto, y por eso sería recomendable que buscaran su independencia celebrando elecciones, presentándose y ganándolas. Salvo goza de la suficiente popularidad y la Fundación siempre va a estar ahí… en principio. En cualquier caso, deberían aprovechar su paso por la institución para que el club sea un ejemplo en la parte directiva. Un faro y un espejo en el que se pueda mirar esta sociedad orgullosa. El Valencia es uno de los referentes más importantes de la Comunitat Valenciana pero nunca ha sido modelo de gestión. Ahora toca que eso cambie. Parece que la dupla Salvo-Aurelio Martínez busca ese camino. La filosofía de club es la correcta en este sentido. Por eso es necesario que se explique quién recomendó, decidió e intervino en el fichaje de Vezo y qué criterios futbolísticos se han seguido. Si no, el discurso de transparencia pierde sentido. La responsabilidad de decir que es un buen jugador no se la pueden dejar a Djukic. La otra opción es vender el club.
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